jueves, 18 de octubre de 2012

Un cadáver exquisito en Artigas



En el marco de las Jornadas de Promoción de la Literatura que promovidas por ProARTE se celebraron los días 16 y 17 en Artigas, se realizaron varios talleres.
Gracias al evento tuve la suerte de conocer a Elder Silva, prolífico poeta y extraordinario conversador, con inacabables anécdotas en su mochila. Por estos días cruzará de nuevo el charco para comenzar en Barcelona la difusión de un libro que incluye poemas suyos, y tengo su promesa de que pronto nos obsequiará con sus poemas; lo mismo que Laura Silva (no son primos ni hermanos ni familiares), poetisa a la que también tuve la suerte de disfrutar embobado con ambos, lo confieso.
El recital en el que participaron los dos lo abrieron el docente Fabricio Díaz y una alumna, que dramatizaron tres poemas de García Lorca acompañados por el profesor Antonio Meneses a la guitarra, también con la ayuda de uno de sus alumnos. Cerró el evento el joven pianista Andrés Arbiza, como siempre espectacular.
En las Jornadas intervinieron con sendas ponencias la Inspectora de Literatura Susana Nieto y el poeta Fabián Severo, analizando diversos aspectos de cómo enseñar Literatura en el aula, y se cerraron con un animado coloquio entre alumnos, docentes y el equipo de ProARTE, que completaban Victoria Espasandín y Alejandra Bentancor.

cadaversexquisito.blogspot.com
Se celebraron dos talleres de poesía, a cargo de Elder, y dos de relato corto, al mío.
Al ser talleres sin continuidad y de solamente hora y media, me decidí por emplear una variante del denominado "cadáver exquisito", cuyas características se explican al final del artículo.
Ninguno de los participantes había escrito nunca un relato de ficción, y el objetivo de los talleres se centraba en que experimentaran en primera persona el proceso creativo, siendo secundario el producto final.
Como íbamos contra reloj, les propuse dividirse en grupos y trabajar en equipo. Y en vez de por turnos, como es habitual, una vez que establecimos la línea argumental que íbamos a desarrollar comenzaron a escribir todos los grupos a la vez diferentes partes del relato.
Seguro que no entrará en los anales de la Literatura, pero conseguimos el objetivo que buscábamos, y finalmente salió el disparatado pero coherente cuento que les propongo disfrutar:

El Profeta


En un pequeño y tranquilo pueblo llamado Silver, muy cercano a las montañas y con poco más de trescientos habitantes, vivía un individuo sin familia, trabajo ni casa. Era de baja estatura, tenía los cabellos muy largos, y la piel oscura. Sus ojos eran negros y de ellos salía una mirada asustadora. Lo llamaban “El Profeta”. Su apariencia era extraña y tenía un mal olor impresionante que espantaba a todos los que se le acercaban. Solía vagar sin rumbo por las calles del pueblo gritando a quienes se lo cruzaban que el mundo se iba a terminar, que todos eran unos pecadores a los que Dios castigaría por el mal que hacían.
Todos los días iba a la plaza del pueblo y se ponía en pie sobre un banco, anunciando sus profecías. Los lugareños se reían de él y no le hacían ningún caso, decían que todo eran puras tonterías y que estaba loco, aunque pese a ello algunos le daban donaciones alimenticias y a veces dinero, e incluso los más viejos del lugar opinaban que alguna parte de lo que vociferaba era verdadero.
El Profeta también aseguraba que se aproximaba una creciente muy grande, que iba a obstruir carreteras y puentes, dejando a muchos pueblos aislados, incluyendo el suyo.
Al ver que la gente no daba importancia a sus advertencias, El Profeta decidió retirarse, triste y agotado. Pero cuando menos lo esperaba, una persona se le acercó:
―¿De qué tratan tus predicciones y por qué tienes tanta seguridad de que sucederán estas desgracias?
cronicadeunpueblo.blogspot.com

Al escuchar esas palabras se sorprendió y sintió su corazón latir más rápido, al notar que alguien le hacía caso, pero cuando estaba a punto de explicar sus misteriosas profecías comenzó a ver que se avecinaba una gran tormenta nunca antes vista. La gente comenzó a correr hacia sus casas y su nuevo amigo le ofreció hospedaje, alimento y abrigo. El Profeta rechazó la oferta porque no quería incomodarlo. Decidió quedarse solo en la plaza bajo la lluvia. El hombre insistió pero no pudo convencerlo, y poco después la tormenta se desvaneció.

Un día, tan tranquilo como todos los demás, comenzaron a suceder sucesos inexplicables:
Juan, un habitante del pueblo, se reía mucho de él y decía a los demás  que El Profeta estaba loco. Cierto día, Juan iba caminando por la calle y notó que alguien venía siguiéndolo. Al principio no le dio importancia, pero al ver que no era una persona conocida, se asustó mucho y comenzó a correr. Dobló una esquina y esperó, y luego volvió a mirar para atrás y no vio a nadie. Al llegar a su casa subió directamente a su habitación, y al entrar notó que estaba corriendo un liquido por la pared; se acercó extrañado y lo probó, y entonces tomó un susto muy grande al darse cuenta de que era sangre. Salió corriendo de su casa para pedir ayuda y encontró un vecino. Volvió con él a su cuarto, pero quedó muy sorprendido al ver que la pared estaba limpia y que allí, aparentemente, no había ocurrido nada…
Otro día, a la gente que circulaba en automóvil  por el pueblo se les detuvieron  los autos al mismo tiempo. Todos se bajaron para ver que sucedía y entonces, segundos más tarde, los motores se volvieron a encender nuevamente.
blogs.los40.com
Tras un día agotador donde  las agujas del reloj habían avanzado aceleradamente, y habiendo culminado  las últimas actividades del día que, por cierto, resultaron ser muchísimas, una chica del pueblo se tiró pesadamente en su cama, dispuesta a comenzar un reparador sueño. Recordó en ese instante que había olvidado cerrar la puerta; fue a levantarse y entonces se dio cuenta de que no lograba mover su cuerpo. A continuación sintió que una fuerza superior la invadía por completo. Intentó gritar para pedir ayuda, pero no tenía voz, sus sentidos no respondían a su voluntad. Luego, algo la tomó del cuello quitándole el aire.
 Alcanzó a  defenderse  tomando los invisibles brazos  que la sofocaban  y tocó una pulsera. Dio un grito desesperante  que la despertó. Se trataba de un sueño.  Entonces respiró profundamente y volvió a dormirse, pero cuando con los primeros rayos de sol que entraron por su ventana  despertó, todavía cansada, vio a su lado  una pulsera gruesa que con seguridad no era suya…
Un gurí llamado Pedro estaba en su dormitorio jugando con su computadora y de repente sintió un ruido extraño. Bajó las escaleras para ver de dónde provenía el ruido y cuando estaba en el último escalón vio pasar una sombra que se dirigía hacia el cuarto de sus padres. Entró a él procurando no hacer ruido pero solo encontró a sus padres durmiendo profundamente. Entonces pensó que todo había sido fruto de su imaginación, volvió a su cuarto y continuó jugando.
flickrhivemind.net
Esa misma noche, tres amigos que estaban frente a un lago cercano al pueblo, alrededor de una fogata, sorpresivamente comenzaron a escuchar ruidos de bestias salvajes que provenían del agua, en la que de pronto se formaron torbellinos al tiempo que se agitaba con violencia. Observaron temerosos el suceso, pero cuando se acercaron a la orilla para verlo más de cerca, las aguas volvieron a tranquilizarse. Al otro día contaron lo sucedido en el pueblo, pero quienes los escucharon pensaron que todo era invención suya.
Otro grupo de amigos que acampaban en un clima de fiesta, disfrutaban la calidez de la noche. De entre ellos, una pareja de novios se separaron hacia unos árboles cercanos al agua, para compartir unos momentos de intimidad.
jaquealarte.com
Pero pasaron las horas y los amigos comenzaron a inquietarse porque los novios no regresaban. Comenzaron a buscarles, gritando sus nombres en plena noche, pero dos horas después, cuando ya volvían al campamento, vieron salir del lago tres luces brillantes de color verde claro. Asustados, salieron corriendo hacia el pueblo, donde ya amanecía. Se encontraron allí con los novios y, cuando les preguntaron por qué se habían alejado, ellos se miraron extrañados y afirmaron que deliraban, porque no habían salido del pueblo en días.
esperandoagala.blogspot.com
Ese mismo día por la tarde, de pronto el cielo se oscureció bruscamente. Comenzó a soplar un fuerte viento que tumbó algunos árboles, mientras destellos de luz relampagueaban en el cielo. Hilos de sangre comenzaron a brotar de las paredes hasta inundar las calles, y los lugareños, asustados, se escondían en sus casas. Un gran estruendo salió de la tierra, que se removió. Pero cuando los gritos de la gente, presa del pánico, llegaron a ser ensordecedores, y algunos de los afectados habían incluso decidido suicidarse, de pronto el viento se calmó y el cielo se despejó.
El Profeta apareció entonces en la plaza y continuó con sus gritos, y luego despareció de nuevo.
Pasaron unos días y una mañana comenzó a llover. Era una lluvia fina, típica del otoño, y aunque continuó por la tarde, nadie se preocupó. Sin embargo, al día siguiente continuaba, y se alargó durante todo ese segundo día y su noche, y luego durante más días y más noches. El pueblo comenzó a ser invadido por sapos y lagartijas, atraídos por el agua.
planetacurioso.com
Incluso víboras con dos cabezas se vieron en el pueblo; la gente comenzó a desesperarse y a creer algo en las profecías. De repente, aquella lluvia se convertía en sangre y al momento siguiente volvía a ser normal.
Cuando todo parecía perdido, bruscamente se recuperó la normalidad. Parecía que no había pasado nada. La gente, asombrada, volvía a sus casas y encontraba todo en orden, seco y limpio, y se preguntaba dónde estaba el misterioso Profeta al que nadie tomaba en serio
No se lo volvió a ver más en el pueblo, pero el recuerdo de sus dichos quedó grabado en la memoria de los lugareños.
portalbonsai.com
Muchos años después, a alguien se le ocurrió levantar un monumento en su memoria. Junto a él, misteriosamente, comenzó a crecer un árbol que con el tiempo se convirtió en un gran ibirapitá. 
La gente del pueblo creía que el árbol era el mismo Profeta, que se había reencarnado en él, y cuando la leyenda se extendió comenzaron a llegar peregrinos de todos los lugares del mundo para meditar y reflexionar sobre los extraños acontecimientos ocurridos en el pueblo.






Estos son los autores del cuento El Profeta, mis felicitaciones para ellos
César Moraes, Esther Genes, Guillermo Rodríguez,
Ricardo Libonatti, Richard Rosas,
Leandro Bentin, Mateo Sarachaga, Gimena de Souza,
Juan Rocha, Andresa de Souza, Edinson Gómez,
Lucas Rodríguez, Daiane Franco, Janaina Ramírez,
Carla González, Viviane Gómez, Katia Chiappini,
Esteban Flores, Carolein Saraiva, Fernando Pereira,
Eliana Antúnez, Sandro Silva, Germán Acevedo,
Lucas Ferreira, Jessica Gonzalves, Bruna Olivera,
Daiana Rodríguez, Victoria Nercia, Paula Rodríguez,
Darío, Titolo, Sandra Suárez, Lila Aguilar,
Henry Álvez, Isabel Priario, Florencia Romero y
María Eugenia Duarte.

........................................................................................
Qué es un "cadáver exquisito"
(artículo completo de la Wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Cad%C3%A1ver_exquisito)

Cadáver exquisito es un juego por medio del cual se ensamblan colectivamente un conjunto de palabras o imágenes; el resultado es conocido como un cadáver exquisito o cadavre exquis en francés. Es una técnica usada por los surrealistas en 1925, y se basa en un viejo juego de mesa llamado "consecuencias" en el cual los jugadores escribían por turno en una hoja de papel, la doblaban para cubrir parte de la escritura, y después la pasaban al siguiente jugador para otra colaboración.
El cadáver exquisito se juega entre un grupo de personas que escriben o dibujan una composición en secuencia. Cada persona sólo puede ver el final de lo que escribió el jugador anterior. El nombre se deriva de una frase que surgió cuando fue jugado por primera vez en francés: «Le cadavre - exquis - boira - le vin - nouveau» (El cadáver exquisito beberá el vino nuevo). En resumidas cuentas se combinan cosas de una idea agregando elementos que pueden o no pertenecer a la realidad. Los teóricos y asiduos al juego (en un principio, Robert Desnos, Paul Éluard, André Bretón y Tristan Tzara) sostenían que la creación, en especial la poética, debe ser anónima y grupal, intuitiva, espontánea, lúdica y en lo posible automática. De hecho, muchos de estos ejercicios se llevaron a cabo bajo la influencia de sustancias que inducían estados de semiinconsciencia o durante experiencias hipnóticas.
Neruda y Lorca los llamaron poemas al alimón; Nicanor Parra y Huidobro, quebrantahuesos (Junto a Parra, Enrique Lihn y Jodorowsky hicieron una exposición denominada "el quebrantahuesos").
Nicolas Calas –vanguardista suizo- sostenía que un cadáver exquisito tiene la facultad de revelar la realidad inconsciente del grupo que lo ha creado, en concreto los aspectos no verbalizados de la angustia y el deseo de sus miembros, en relación con las dinámicas de posicionamiento afectivo dentro del mismo. Ernst observó que el juego funciona como un 'barómetro' de los contagios intelectuales dentro de un círculo de creadores.
Decía Rulfo que no existen más que tres temas básicos: el amor, la vida y la muerte: para captar su desarrollo normal, hay que saber cómo tratarlos, qué forma darles, sin repetir lo que han dicho otros. En tanto metabolismo continuado de anteriores lecturas, podría considerarse si la literatura no es en sí misma un gran cadáver exquisito a partir de temas y preocupaciones bastante simples.




3 comentarios:

  1. Antonio, gracias por la parte que me toca! Un abrazo fuerte!
    Buen trabajo!

    ResponderEliminar
  2. Un trabajo que demuestra todo lo que se puede conseguir cuando se trabaja en equipo. Gracias Antonio por promover una modalidad de creación literaria que une a los participantes en el placer de la escritura.

    ResponderEliminar
  3. Antonio gracias por promover una modalidad de creación literaria que nos es tan cara y que habilita la construcción conjunta, pilar fundamental en nuestra asignatura.

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...